La Pandemia y el Comercio Electrónico.

El comercio online vivió una explosión desde que se decretó el aislamiento social preventivo y obligatorio. Muchas pymes se embarcaron en el lanzamiento de nuevos canales de venta online. Desde los servicios de mensajería hasta la creación de sus propias tiendas online, los comercios se fueron adecuando a las demandas del cliente. Las billeteras virtuales están creciendo de forma exponencial y hasta WhatsApp quiere entrar en el negocio.

El aislamiento social preventivo y obligatorio (ASPO) por el nuevo corona virus (covid-19) aceleró la tendencia a la digitalización. Con las persianas cerradas, el comercio pasó de las calles a las computadoras y los teléfonos celulares.

Un informe de Mercado Libre divulgado en marzo ya señalaba que 8 de cada 10 latinoamericanos compraron online al menos una vez en 2019.

En el mes de mayor cantidad de restricciones a la circulación, abril, la compra online creció un 85 por ciento, de acuerdo con cifras de la Cámara Argentina del Comercio Electrónico (CACE). Muchas de estas transacciones electrónicas fueron de consumidores que por primera vez se acercaron a los canales de compra online.
La tendencia no es nueva. Un informe de Mercado Libre divulgado en marzo ya señalaba que 8 de cada 10 latinoamericanos compraron online al menos una vez en 2019. Además, se estima que para el 2023 el comercio electrónico de América Latina alcanzaría tasas de crecimiento cercanos al 40 por ciento – los datos no tienen en cuenta el contexto de pandemia -.

La Cámara Argentina de Comercio Electrónico (CACE) enumera los beneficios del Comercio Electrónico.

Para los comercios, especialmente la pequeña y mediana empresa, la venta online abre la puerta a incrementar ventas y llegar a un mercado mucho más amplio. CACE enumera una serie de beneficios que el entorno digital ofrece a las pymes:
  • Reducción de costos: una tienda virtual permite economizar recursos y minimizar la logística entre varias sucursales, además de crecer sin tener que invertir en infraestructura física.
  • Mayor competitividad para ganar visibilidad.
  • Comodidades para el usuario por la posibilidad de consultar precios, realizar pagos online y recibir los productos en el hogar.
  • Aumento de comunicación con los clientes.